A simple vista Far Cry 3 podría verse como una aventura en una isla con mercenarios y armas, la idea parece atractiva a priori ya que pocos juegos ofrecen esa misma experiencia pero vamos a ver qué nos ofrece realmente este juego y si vale la pena, como siempre en mis análisis evitando todos los spoilers:

En un principio la historia se desarrolla de forma rápida y algo atropellada. Somos un chico americano que se ve capturado por mercenarios con malas intenciones, viéndonos obligados a huir de la isla en la primera ocasión, así que nos vamos a ver bastante perdidos. Este juego con aspecto de FPS, verdaderamente bebe mucho de un Sandbox y algo de un RPG por lo que no habrá un camino fijado. Si bien existe en todo momento una historia principal que hila toda la aventura y un indicador en el mapa siempre nos deja claro donde podemos dar nuestro próximo paso, no existe obligación alguna de seguirla sin pausa y nada nos impide explorar a nuestro antojo tanto como deseemos, experiencia muy recomendable por lo enorme de la isla y el notable mimo puesto en cada “rincón". A pesar de llamarse Far Cry 3 no tiene relación alguna con sus entregas anteriores, y es que, mientras los anteriores terminaban más o menos cerrados, éste mantiene el interés y avanza a buen ritmo.

Lo primero que debemos dominar para hacernos “fuertes” es el cómo administrar nuestros puntos de experiencia que podemos asignar a varios aspectos dentro de tres categorías, así podemos, por ejemplo, hacer ataques nuevos, ser más rápidos o tener más salud amén de otras habilidades. También mejoramos el inventario pudiendo llevar más armas (hasta cuatro a distancia, un cuchillo, un cóctel molotov y granadas) consiguiendo pieles de animales de la isla (algunos son dóciles mientras que otros nos atacarán a la mínima oportunidad o huirán rápidamente).

El manual “ingame” del juego es muy extenso y nos muestra todo tipo de información como facciones, personajes del juego, objetos coleccionables, etc. Además de esto, conviene localizar en el mapa los puntos de venta de armas, donde podemos comprar asimismo munición o trozos de mapa por ejemplo. Durante el juego podemos exterminar completamente un campamento enemigo haciéndonos con su control; éstos serán un punto de comienzo de partida para cuando volvamos al juego y además nos permitirán, al igual que los puntos de venta, comprar y cambiar armas, entre otras cosas. El mapa, aparte de su extensión, está lleno de items que debemos identificar, desde el tipo de animal que habita en cada zona (importantes para ampliar inventario y mejorarlo) hasta pruebas de habilidad (que nos otorgan armas y logros) y torres de radio (que debemos escalar para activar a fin de que el mapa nos muestre una zona mayor).

La variedad de armas es importante, estando clasificadas por categorías y permitiendo incluso cambiar su aspecto y mejorarlas con miras telescópicas, láser, silenciador u otros elementos. La salud se recupera fabricando jeringuillas (con flores que debemos recolectar) pero según avanzamos, éstas se hacen cada vez más prescindibles puesto que vamos ganando habilidad para recuperar salud automáticamente. Los humanos que nos encontremos pueden pertenecer a varias facciones, varias de ellas enemigas, por lo que no basta con disparar a todo. Es destacable la I.A. de los enemigos que, lejos de ser predecibles, nos intentan rodear o se alejan de los puntos de mayor riesgo de explosión, no obstante dista de ser perfecta ya que sufren de cierta lentitud al reaccionar. Otro aspecto a mencionar es la variedad de vehículos que nos encontramos y que podemos conducir, destacando su posibilidad de deterioro y el sistema de daños que implementan. Destacable es, del mismo modo, la variedad de localizaciones y el apartado gráfico del juego. En lo que respecta a las primeras decir que, a pesar de situarse en una isla, no todo serán playas y palmeras sino que existen construcciones humanas como los mencionados campamentos, fuertes o embarcaderos. No obstante cabe mención especial a los paisajes naturales como cuevas inundadas, cascadas, ríos, plantaciones, o la propia selva. En lo que respecta al apartado gráfico el juego ralla a un gran nivel, especialmente debido a la enorme distancia de visión, a los cambios climáticos y al efecto de la hora del día. Por último se hace necesario destacar el gran trabajo sonoro, tanto por los efectos de sonido de las armas y vehículos, como en lo que respecta a las voces de los enemigos y a la grandísima traducción a nuestro idioma, sin olvidar por supuesto la gran banda sonora que nos brindará algunos momentos muy buenos.

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No todo podía ser bueno como es lógico. Es reprochable, por ejemplo, que las pruebas repartidas por el mapa no tengan peso alguno en la historia ni sean imprescindibles, parece que hayan sido añadidas para sumar horas de juego y aunque me parecen divertidas, son tantas que al final llegan a cansar. Al ir en busca de pieles de animales se muestra una animación de cómo la desolla, algo muy vistoso pero demasiado lento con lo que a la larga puede hacerse reiterativo. Del mismo modo sucede al inspeccionar cajas ya que el botón no responde siempre como debería y esos segundos que perdemos lo hacen tedioso. La conducción de vehículos se hace complicada con el teclado, se antoja evidente que el juego esta pensado principalmente para ser controlado con mando, lo cual se refleja especialmente al manejar coches o quads (no así al utilizar lanchas o alas delta) donde nos veremos más de una vez apunto de chocar por la mala implementación del control en este sentido. Ello afecta negativamente a la experiencia dado que la combinación teclado+ratón parecería en principio la mejor opción por la precisión al apuntar/disparar. Por último cabe añadir respecto del sistema de ayudas, que si bien es bastante comprensible para no perdernos con frecuencia o no perder el tiempo en tareas redundantes, adolece del fallo de que al fijar con los prismáticos a todos los enemigos a nuestro alcance, una vez nos los desequipamos, éstos se siguen mostrando en pantalla aunque estén ocultos, lo que nos facilita enormemente tareas como la de limpiar un campamento cargado de soldados (mientras no nos rodeen) o el no perder a un animal rápido por mucho que corra. Esto podría justificarse pensando que se debe al "instinto” del personaje pero no parece una explicación demasiado factible.

Después de todo lo dicho solo me queda recomendar este juego a todos los que os haya gustado la descripción de lo que vais a encontrar. Estamos ante un juego que puede durar muchas horas según cómo lo afrontemos y que nos hace vivir una experiencia bastante completa.

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